Luz verde en el Congreso
• La norma “garantiza a los ciudadanos poder desplazarse en condiciones de seguridad y asequibilidad”, apunta Rafael Barbadillo, presidente de CONFEBUS.
• El autobús posibilita este derecho, así como el resto de pilares de la Ley: un transporte limpio e innovador al que se le dedica un gasto público eficiente.
El Congreso de los Diputados aprobó el pasado miércoles, 8 de octubre, con 174 votos a favor y cuatro abstenciones, el proyecto de Ley de Movilidad Sostenible. La principal novedad de la norma es el reconocimiento de la movilidad como un derecho de toda la ciudadanía, en línea con las reivindicaciones de CONFEBUS.
El presidente de CONFEBUS, Rafael Barbadillo, celebra que la aprobación de la Ley naturalice por fin la movilidad como un derecho más. “La ley beneficia al ciudadano porque garantiza el derecho a desplazarse por todo el territorio nacional de forma segura y asequible, a la vez que fortalece e impulsa un servicio público de transporte en autobús de calidad para todos.”.
El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible señala al autobús como principal garante de este derecho a través de la consolidación del sistema concesional de transporte. Según el departamento dirigido por Óscar Puente, este sistema garantiza que ningún ciudadano perderá oportunidades de viaje.
CONFEBUS considera positivo que la Ley de Movilidad Sostenible recoja estas preocupaciones, puesto que se encuentran en la razón de ser del servicio que presta el autobús en España. Ningún otro transporte público llega a tantos núcleos de población para asegurar que cada día millones de personas acudan a su lugar de trabajo, de estudios o a su centro de salud. Por eso, la garantía por parte del Ministerio de que ningún ciudadano perderá alternativas de transporte público viva donde viva, es recibida muy positivamente por parte de CONFEBUS.
Este es uno de los cuatro pilares en los que se basa el proyecto de ley de reciente aprobación. El autobús puede ser, asimismo, un posibilitador del resto de pilares. Empezando por aquel que entiende la movilidad como una actividad limpia y sana. El texto de la norma “urge avanzar en la descarbonización del sector”, con el autobús como catalizador, ya que las emisiones de uno solo de estos vehículos equivalen a las de 20 turismos. Además, es el medio de transporte por carretera más seguro, con unos índices de siniestralidad muy por debajo del resto de alternativas (0,1% del total de la carretera).
El tercer pilar supone apostar por la innovación. En ese sentido, las compañías del sector del autobús realizan importantes esfuerzos cada año para que sus flotas y sistemas estén a la vanguardia tecnológica: la inversión de las más de 2.600 empresas que integran el sector alcanza los 1.000 millones de euros anuales, destinados a la modernización y mejora de eficiencia y seguridad de los vehículos.
Por último, el cuarto pilar hace referencia a mejorar la calidad de las decisiones de gasto público en transporte y movilidad. De nuevo, el autobús ha de estar en el centro de esta cuestión. Sirvan como ejemplo los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) y el Fondo Social para el Clima de la UE. Todo lo que se dirija de ambos fondos al sector del autobús será un gasto eficiente, poniendo al ciudadano como principal beneficiario y cumpliendo, al mismo tiempo, los objetivos de descarbonización.