CONFEBUS ha valorado el proyecto de Real Decreto que modifica la normativa del Certificado de Aptitud Profesional (CAP) y pide medidas más flexibles y realistas en la formación de conductores para hacer frente a la grave escasez de profesionales que afecta al transporte por carretera. La Confederación apuesta por generalizar el aula virtual, impulsar la teleformación y adaptar la normativa española a las flexibilidades permitidas por la UE, garantizando siempre la calidad de los cursos y la seguridad del sistema.
La Confederación ha participado en el proceso de consulta pública sobre el proyecto de Real Decreto por el que se modifican el Real Decreto 284/2021, que regula la cualificación inicial y la formación continua de los conductores, y el Real Decreto 1211/1990, que aprueba el Reglamento de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres.
CONFEBUS considera positivas las medidas planteadas, especialmente la posibilidad de ampliar el uso del aula virtual en los cursos de Certificado de Aptitud Profesional (CAP). Esta flexibilización, ya probada con éxito durante la pandemia, permitiría avanzar en la modernización de la formación y contribuir a paliar la grave escasez de conductores que afecta al sector.
Escasez de conductores: un problema creciente
España es el tercer país de la UE en empleo en el transporte de viajeros por carretera, solo por detrás de Alemania y Francia. El sector ofrece un empleo estable, de calidad y con condiciones salariales superiores a la media del sector servicios, pero la falta de conductores amenaza el crecimiento empresarial y el funcionamiento de las redes de movilidad.
En este contexto, CONFEBUS insiste en que la flexibilización del CAP es clave para facilitar el acceso a la profesión y hacerla más atractiva, reclamando:
• Equiparar la modalidad de aula virtual a la presencial en CAP inicial y continuo.
• Desarrollar de inmediato la normativa pendiente sobre teleformación, que permitiría ampliar el número de horas online.
• Incorporar medidas europeas de flexibilidad, como permitir que conductores de terceros países puedan iniciar su formación en embajadas españolas o conducir provisionalmente mientras completan el CAP aquellos que estén siguiendo un curso de formación profesional.
Garantías de calidad y seguridad
CONFEBUS coincide en que la formación virtual debe realizarse en plataformas específicas con todas las garantías de control e identificación de los alumnos. Asimismo, propone que la norma incorpore indicadores de calidad, sistemas de evaluación y que la formación sea bonificable, como ya ocurre con la impartida a través de SEPE y FUNDAE.
Otras propuestas regulatorias
La Confederación solicita además que se estudie:
• Reducir la formación continua de 35 horas cada 5 años a 17 horas cada 3 años, sin perder calidad formativa.
• Revisar las excepciones al uso del tacógrafo y a las normas de tiempos de conducción y descanso en islas y territorios aislados, ampliando los umbrales permitidos por la normativa europea para adaptarlos mejor a la realidad española.
Compromiso del sector
“La falta de conductores es uno de los principales retos del transporte por carretera. Urge adoptar medidas flexibles y realistas que permitan garantizar el relevo generacional y mantener la calidad del servicio público de movilidad”, señalan desde CONFEBUS.
La Confederación recuerda que esta iniciativa debe complementarse con otras y agradece las medidas ya puestas en marcha, como la supresión del certificado para conductores de terceros países en el caso del transporte en autobús, la campaña para mejorar la imagen del sector o las ayudas previstas para la obtención de los permisos de conducir de las clases C y D.