• La atención debe centrarse en la mejor relación calidad/precio, no solo en el precio más barato.
• Las nuevas normas deben fomentar la participación de las pequeñas y medianas empresas (PYMEs), las licitaciones transfronterizas y la compra de productos europeos.
• Hay que sustituir 907 páginas de legislación sobre contratación pública por normas más breves y sencillas.
La Comisión de Mercado Interior y Protección del Consumidor del Parlamento Europeo ha aprobado un informe en el que expone sus prioridades para la revisión del marco de contratación pública. Con este informe de propia iniciativa, exponen las expectativas de los eurodiputados respecto a la Comisión antes de la revisión legislativa de las actuales normas de contratación pública, prevista para finales de 2026.
Mejor relación calidad/precio, no sólo el precio más barato
Uno de los principales mensajes de los eurodiputados es que los concursos públicos ya no deben centrarse únicamente en las ofertas más baratas. Cuando un proyecto inicial es muy barato, más adelante los costes de mantenimiento obligatorio pueden resultar considerablemente más elevados de lo que habrían sido en proyectos alternativos. Además, los materiales más baratos pueden resultar perjudiciales para el medio ambiente, y las condiciones de los trabajadores empleados en proyectos de bajo coste pueden ser muy deficientes. Los eurodiputados quieren que la Comisión dé más peso a otros criterios, como los sociales y medioambientales, en las licitaciones públicas.
Simplificación y fomento de la participación de las PYME en las licitaciones
Otro aspecto en el que la Comisión debe centrarse, según los eurodiputados, es en facilitar la participación de las PYMEs en los procesos de licitación, a las que, actualmente, les resulta casi imposible competir en las grandes licitaciones. Para fomentar su participación, los concursos deberían dividirse en lotes más pequeños y las normas deberían ser más sencillas y claras.
Hay más de 476 artículos y 907 páginas de ley que regulan los concursos públicos. Esto supone un reto para todas las empresas, pero especialmente para las PYMEs. Los eurodiputados quieren que la Comisión encuentre una manera de simplificar y clarificar las normas, asegurándose al mismo tiempo de que los poderes adjudicadores mantienen la flexibilidad y las normas rigen sólo cómo comprar, no qué comprar.
Preferir trabajadores europeos e internos, elevar los umbrales
Los eurodiputados también afirman que las autoridades públicas deberían poder preferir proyectos que animen las economías y empresas locales. Dado que el apoyo a las empresas europeas es especialmente importante en los sectores estratégicos, la Comisión debería buscar formas de permitirlo sin recurrir al proteccionismo.
El informe también subraya que la Comisión debería considerar la opción de preferir a licitadores que utilicen trabajadores de la propia empresa, para evitar complicados esquemas de subcontratación que dan lugar a una escasa responsabilidad y corren el riesgo de violar los derechos laborales.
Por último, los eurodiputados apoyan cambiar los umbrales de precios que regulan la elección del procedimiento de contratación.
Siguientes pasos
El proyecto de informe, que fue aprobado en el Comisión por 34 a favor, 13 en contra y 2 abstenciones, ahora tendrá que ser votado en el Pleno, muy probablemente el próximo mes de septiembre.